La inocencia inteligente de Marina Yuszczuk aborda cuestiones modernas y de la vida cotidiana y las transforma en pequeños textos.
No se priva, sin embargo, de una particular dulzura construida por recuerdos de infancia y sueños, que van alimentando un estilo particular.
No se priva, sin embargo, de una particular dulzura construida por recuerdos de infancia y sueños, que van alimentando un estilo particular.
"Algunas cosas que se pueden hacer para aumentar nuestra acuaticidad. Ir bien cerca del fondo, como un tirabuzón, girando, al mismo tiempo que se avanza. Para esto se patea más con una pierna, de esa manera el cuerpo gira. Al principio marea. Ir por el fondo como un delfín, es decir ondulando. Que no es tan fácil, porque la vida en general no ofrece posibilidades de ondular, uno siempre está recto, sentado o acostado, pero hay que estar recto. Hay que tratar de pararse bien derecho. La columna es nuestra guía. Para moverse en el agua es mejor ondular, captar el movimiento de las olas y aprovecharlo, mover agua cortándola con movimientos suaves, parecidos a ella, nunca con hachazos o paladas".